¿Cuáles son los principales destinos para hacer carrera en el sector de las criptomonedas? Para algunos, son los centros o «hubs» de innovación tradicionales, como Miami o Silicon Valley. Para otros, es Singapur o Seúl. Además, hay quienes incluso afirman que mientras se tengas una conexión estable a Internet, independientemente de la ubicación, es suficiente para que uno se labre su propio camino en el reino de la Web 3.0.
Para responder a esta pregunta, la redactora jefe de Cointelegraph, Kristina Lucrezia Cornèr, preguntó a un grupo de expertos en el panel anual de la Web Summit, celebrado en Lisboa. Entre los ponentes del evento se encontraban Zach Coelius, socio director de Coelius Capital, Laura González-Estéfani, fundadora y CEO de theventure.city, y Oscar Ramos, socio general de Orbital Startups.
Según González-Estéfani, quien nació en España pero pasó la mayor parte de su tiempo en el Área de la Bahía de San Francisco y Miami, el próximo centro tecnológico será un lugar donde las personas puedan «obtener el apoyo que necesitan de los diferentes socios, inversores, y constructores de ecosistemas». Y para González-Estéfani, es más probable que ese lugar esté en Estados Unidos que en Europa.
«El Área de la Bahía es muy accesible; cualquiera está dispuesto a ayudarte. La gente te ve y se enamora de tu visión; si buscas financiación, hay muchos empresarios dispuestos a ayudarte. Si vas a Miami, hay una gran mezcla de gente de todo el mundo, empresarios de todas las edades. Pero si miras a Europa, es mucho más conservadora».
La opinión de González-Estéfani, sin embargo, no tuvo eco en la de Coelius, que nació en Minnesota y se trasladó a la zona de la bahía en 2005. Su visión del asunto es muy diferente: «Cuando llegué por primera vez, vi miles de millones de dólares fluyendo hacia la industria tecnológica», dijo Coelius. «Pero esa energía, que estaba toda centrada en el Área de la Bahía, se ha dispersado ahora por todo el mundo. Así que, ya sea en Miami, Lisboa o Kosovo, la innovación es increíble en todo el mundo».
Coelius añadió que la mentalidad de grupo en el Área de la Bahía es uno de los principales factores por los que cree que los próximos centros tecnológicos estarán en cambio en lugares dispersos por todo el mundo:
«Muchas personas piensan de la misma manera, van a las mismas fiestas, juegan los mismos juegos, piensan las mismas cosas. Y eso hace que las cosas sean realmente aburridas. Por eso, personalmente estoy muy entusiasmado con todas las nuevas ideas». que están apareciendo para la gente en todo el mundo».
En cuanto a Ramos, que también procede de Madrid pero lleva 15 años viviendo en Asia, cree que el futuro de los desarrollos tecnológicos se concentrará en Oriente. «En China, he visto la revolución de un sistema técnico», dijo. «Cuando llegué, no se podía pagar nada por Internet. Necesitabas que alguien viniera a verte y le pagabas a esa persona. Y ahora, hay un mercado que estamos viendo como el ecosistema FinTech más avanzado del mundo».
En este punto, Lucrezia-Cornèr también se sumó al asunto. Mientras que Cointelegraph tiene su sede en más de 30 países, Lucrezia-Cornèr gestiona sus asuntos corporativos cotidianos en un pequeñísimo pueblo italiano de menos de 7,000 habitantes. «Si reuniéramos a toda la gente en un solo lugar, realmente perderíamos todo nuestro valor». dijo, y continuó: «Porque nuestro valor no está supeditado al lugar en el que estamos radicados, sino a que seamos capaces de buscar los gustos de los demás».
Coelius parece estar de acuerdo, y añade que su consejo para los empresarios y los trabajadores es: «ir donde está tu red, donde está tu sistema de apoyo, donde se ha construido tu infraestructura. Y luego, puedes reclutar talento de todo el mundo».
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